Hemos de decir que conocimos el trabajo de Ernesto, al escoger el sitio de la celebración de la boda. La naturalidad con la que capta todos los momentos de ese día, y el cuidado que transmite con cada imagen hicieron que nos decidieramos por ellos, y casi nos da algo cuando Carmen nos dijo que tenían otra boda mi mismo día por la tarde, aunque podrían cubrir la nuestra también. Así que no lo dudamos y les dijimos que sí al día siguiente. Queríamos que Ernesto fuera nuestro fotógrafo, y no nos arrepentimos en absoluto. Las fotos de la boda, como de la postboda, no pueden ser mas bonitas. El trato que recibimos tanto por Carmen, como de Ernesto y del resto del equipo fue excepcional. Por no hablar de los tiempos de entrega, ya que a la vuelta de nuestra luna de miel las teníamos todas. Sin duda alguna los escogería mil veces mas. ¡Muchas gracias, chicos! Seguid capturando esos momentos tan bonitos.