Ernesto Naranjo
+34 668 579 731
bodas@ernestonaranjo.com
Un correo en el buzón con el asunto boda en Finca la Higueruela fue el primer contacto. Con este mensaje nos dimos cuenta que el caso de Emilio y Virginia iba a ser especial en todos los sentidos. Son una pareja que derrocha naturalidad, simpatía y mucho mucho amor; además querían hacer de su boda una gran fiesta donde disfrutaran todos sus invitados, y para ello no dudaron en contar con los mejores profesionales del sector.
La celebración de su boda fue toda una fiesta donde no faltaron hasta fuegos artificiales. Inspirado en el vino, lleno de botellas, corcho y uvas, el seating plan estaba precioso. Fue realizado por El Jardín Romántico, junto con todas las decoraciones florales. Antes de que la noche se hiciera aún más oscura, un grupo rock/pop amenizó la barra libre y nos hizo bailar un montón.
El día empezaba cerca de la casa de Virginia, en el Hotel Alfonso X. Este lugar fue el elegido por Emilio, para vestirse con su chaqué clásico y chaleco de Tom Black, que completó con zapatos Guy Laroche y corbata Brooks Brothers.
Virginia vivió los días previos con mucha intensidad y nerviosismo pero, tras sus numerosas despedidas de soltera, llegó el día que ambos habían preparado con tanto esmero. Eligió un estiloso vestido de la firma Pronovias, aunque su mayor tesoro lucía en sus pies, unos maravillosos Jimmy Choo. Remataba el look un colorido ramo, obra de nuestra amiga Jana, de El Jardín Romántico.
A escasos metros donde los ya casi marido y mujer se preparaban, se erige la iglesia de San Pedro, la más céntrica de todas las parroquias de la ciudad. En esta bonita iglesia es donde se dijeron “para siempre” Emilio y Virginia. Estamos seguros de que jamás olvidaremos esta boda tan singular ni a esta pareja tan especial.
Si te ha gustado esta boda en finca la Higueruela, puedes ver esta otra, que también se celebró en la parroquia de San Pedro de Ciudad Real, pinchando aquí.